Existe la creencia popular de que un “año humano” equivale a 7 años caninos, pero parece que esto no es del todo cierto.
En realidad lo que intentamos hacer a la hora de establecer equivalencias, es adaptar todo a nuestra particular medida, fruto, sin duda, del exacerbado “homocentrismo” que preside nuestra cultura, al considerar que somos el centro del mundo y, casi, del Universo.
Parece, entonces, que tenemos la necesidad de saber la edad de nuestros perros “si estos fueran personas”, algo que no tiene la menor importancia pero que llevó, en base a un estudio estadístico, a establecer esa medida estandarizada del 7 a 1.
Con los años, el avance en la medicina veterinaria y en el estudio de los perros ha llevado a muchas conclusiones. En respectivo a la longevidad, está claro que no todos los perros viven lo mismo y, para ello, además de situaciones particulares como estilo de vida, ejercicio, alimentación, etc., influyen también factores genéticos, unos muy genéricos, como la certeza de que, estadísticamente, las razas viven más cuanto menor es su tamaño corporal, y otros más concretos, que afectan a cada una de las razas (y a sus innumerables combinaciones)
Como sería difícil (y tal vez absurdo) establecer 400 calendarios para las 400 razas conocidas y hacer una tabla de combinaciones para los perros mestizos, ahora se ha elaborado una nueva “tabla de esperanza de vida” y de equivalencia, en función del tamaño de las razas.
Podéis empezar a calcular la edad de vuestros amigos en la siguiente tabla:
